18 de septiembre de 2011: 5 años sin Julio López. Documento del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia.

Se cumplen hoy 5 años  de la  desaparición  de  nuestro compañero  Julio López. 5 años de impunidad, 5 años de  encubrimiento  y  silencio oficial.

Una vez más, recordamos cómo, ante su ausencia y a pesar de lo difícil que resultaba creer en la posibilidad  de su secuestro, salimos a las calles a exigir su aparición.

La silueta de su rostro recorrió la argentina en multitudinarias marchas exigiendo su aparición con vida y el castigo a los responsables de su secuestro. Su imagen, testimoniando  en el juicio  del genocida  Etchecolatz,   se  convirtió en  el  emblema de esta  etapa de  lucha  contra la  impunidad y  por  la  aplicación  de  castigo a los genocidas.

A partir  de  ese momento  y durante  estos  5 años, la respuesta  del gobierno nacional y provincial a nuestras demandas fue  la  descalificación y el silencio.  Poblamos  las  calles con nuestro reclamo y recorrimos  cuanto  despacho oficial y judicial era posible.

Exigimos al gobierno una y otra  vez, que impulsara la acción necesaria  para  dar con el paradero  de Julio y con los  culpables de su desaparición.

A pesar de los discursos  soberbios  y altisonantes,  el  gobierno que  se autoproclama  defensor de  los derechos  humanos,  no consideró  de  su incumbencia  ocuparse del  tema. Por  el contrario la  presidenta  inaugura las  plantas  de  bioetanol con los Blaquier y premia  a Mercedes Benz, empresas que entregaron  a la  dictadura  centenares de  trabajadores,  que  en  su  inmensa  mayoría  permanecen desaparecidos.

Por eso  hoy, a  5  años,  convocados por  el  Encuentro Memoria  , Verdad  y Justicia,  estamos  una  vez más  en la  Plaza,  reafirmando que:

Acusamos   a los gobiernos  nacional  y provincial de encubrir la  desaparición. Los  responsabilizamos  de  usar  el silencio para  impulsar  el  olvido  que   sostiene  la  impunidad.

Los  acusamos  de  haber  renunciado  a su responsabilidad de  buscar  y encontrar  a  nuestro compañero Julio, y  a su obligación de  detener, juzgar  y  condenar  a  los  responsables.

Lo  hacemos  concientes de que  esa  política  de impunidad es coherente con la  política  represiva que  implementa hacia  la  protesta social.

La mano de  obra  genocida, así como  sus  discípulos   presentes en las  fuerzas  de  seguridad , están  dispuestos  y son utilizados para reprimir  la   protesta  social.

El poder  judicial  demuestra   palmariamente  en  este  caso como es capaz de actuar cuando está al servicio de los sectores dominantes. La causa  judicial  de  Julio es un ejemplo descarado de las maniobras de impunidad y encubrimiento de las que  son responsables jueces y fiscales subordinados al poder  político o a las  fuerzas represivas.

Una vez  más  el  discurso  de derechos humanos del gobierno  es  un doble  discurso. La  realidad  desmiente  sus  afirmaciones.

La  anuencia  oficial, del gobierno y  de la  justicia,  con la desaparición  de  Julio y la  impunidad que lo rodea , han  sido la   condición que  facilitó  el  asesinato  de Silvia  Suppo, los  secuestros de  Gerez, Pouthod y de Víctor Martínez y las  centenas  de  amenazas a testigos  y querellantes en  los  juicios  contra  los  genocidas.

Jamás  se  investigó  a  la  Bonaerense, que en  todos  estos  años, y  en las  más  diversas situaciones  , demuestra  ser  una  verdadera organización mafiosa.

Hoy, a 5 años  de la  dolorosa  desaparición de Julio, estamos  en esta  Plaza   para ratificar la  lucha  popular contra  la  impunidad, para  denunciar el encubrimiento, para oponer  voz  al silencio  de los  de  arriba, para reclamar  justicia.

Y, junto  a  nuestros  30000, está  Julio  con nosotros,  exigiendo cárcel  común y efectiva  a sus secuestradores,   a todos   los represores y asesinos, a todos los  genocidas.

Compañeros y compañeras:  Levantamos  aquí las  banderas de la  lucha  por la  memoria,  por  la  verdad,   por  la  justicia . Son las  banderas  de nuestra  responsabilidad histórica   con los compañeros  detenidos  desaparecidos y con Julio López.

Por  ellos y por  nosotros  también levantamos  las  banderas del derecho  inalienable y el compromiso a  luchar   por  vivienda,  trabajo y  salario digno para todos,   por  educación  y salud   para  nuestro pueblo,  contra  la  entrega de nuestros recursos naturales,  contra  el pago  de la ilegitima  y usuraria deuda  externa,  contra  la  depredación  ambiental  de las  empresas imperialistas. Por  un  país  sin opresión, sin  explotación,  por  el  que  ellos  dieron su vida.

Por  eso  reinvindicamos  y  nos  sentimos  partícipes de  las  puebladas, movilizaciones; cortes de ruta, huelgas, ocupaciones de fábricas, de tierras y de edificios públicos, escraches a genocidas, acampes, piquetes, que son la expresión más  genuina  de la disposición  a la  lucha y   de la rebeldía  popular.

Porque  defendemos   el  derecho  a luchar  y a organizarse de nuestro pueblo  estamos  aquí, con la misma convicción de Julio, denunciando al gobierno nacional y  también  a  Macri y los  gobiernos provinciales, por  la  brutal  criminalización  de la  protesta  social y por  la  impunidad, de las que son responsables.

Con  dolor  y con bronca  tenemos  que  decir que:
En  el último  año fueron  asesinados  por  las  fuerzas represivas y por  las  patotas 14  compañeros.
Y que la respuesta del   gobierno a la  ola  de  luchas  populares   que recorren el país  ha   estado marcada por  la represión.
que  el  gatillo fácil, instrumento  de criminalización  de la  pobreza, sigue  golpeando a  nuestros  jóvenes.

Estamos hoy alzando nuestra voz  exigiendo  juicio y castigo:
por Julio, por Luciano Arruga, por los chicos de Bariloche (Diego Bonefoi, Nicolás Carrasco y Sergio Cárdenas ), por Mariano Ferreira, por los hermanos  Qom y Pilagá de Formosa ( Roberto López y Mario López),  por  Mártires López de  Chaco, por los compañeros  del Indoamericano (Bernardo Salgueiro, Rosemary Chura Puña y Emilio Canavari), por los compañeros de  Jujuy (Ariel Farfan, Juan José Velazquez, Felix Reyes).

Como nuestro pueblo  sí tiene  memoria  estamos,  con Petete Almirón, Darío y Maxi, Cristian Ibáñez y Marcelo  Cuellar,  Carlos  Fuentealba, Lázaro  Duarte y con todos los asesinados  por  luchar  en los  gobiernos  constitucionales  posteriores a la  dictadura

Estamos, junto  a  Julio, denunciando  que  la  impunidad de los  responsables  políticos  y materiales de los asesinatos  de nuestros hermanos se garantiza  una  y otra  vez, mientras  se  persigue  y judicializa a los miles de trabajadores que hoy se organizan y reclaman. Así el poder judicial, sumiso a los mandatos del poder político, sigue procesando penalmente a los que luchan  y  dando curso a los juicios por desafuero de decenas de delegados en todo el país. Se persigue con el  Código Penal en la mano, siguiendo la amenaza de  Anibal Fernandez, a los dirigentes de organizaciones estudiantiles, obreras y de desocupados que reclaman en las calles. Son más  de  4000  los  procesados  por  luchar.

Estamos exigiendo  la  inmediata  libertad  de  los trabajadores de  Santa  Cruz, presos  por  luchar, Víctor  Oñate y  Juan  José  Acosta , de  Karina Germano, de Carlos Olivera.

Con  la  presencia y con la ausencia de  Julio, estamos junto a  los trabajadores de Kraft, de DANA, de Jabón Federal, de Fate, del Indec, del  Teatro Colón, del Garraham y  del  Gutiérrez, del Hospital Francés, de los petroleros y docentes de Santa Cruz, de Sitraic, de Call Center  y los  tercerizados de Telefónica, del Subte  y  los  ferroviarios; junto a los trabajadores desocupados, junto al movimiento campesino y a los pueblos originarios, junto a los estudiantes y todos aquellos  que  luchan,  crean organizaciones y levantan su voz para exigir justicia, para exigir salarios dignos, para exigir  tierra y vivienda, educación y salud para todos.

Así como Julio, a pesar de todas las torturas, de todos los horrores, de todas las injusticias,  pudo plantarse frente a los poderosos y poner su voz por los  que   fueron privados de su  voz, al servicio de  nuestro pueblo,  hoy estamos aquí ,  para  seguir  denunciando  los  crímenes  contra  el pueblo, para seguir luchando  para  conquistar   un país  sin opresión  imperialista   y sin explotación, que  haga  realidad   los sueños  de  nuestros  30000  compañeros  detenidos –desaparecidos.

Marchamos con vos, Julio, y exigimos al Gobierno tu aparición con vida YA!.

Castigo a todos los culpables!